RELMECS, junio 2016, vol. 6, no. 1, e001, ISSN 1853-7863
Universidad Nacional de La Plata - Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación.
Centro Interdisciplinario de Metodología de las Ciencias Sociales.
Red Latinoamericana de Metodología de las Ciencias Sociales

 

PRESENTACIÓN

 

Investigar desde América Latina y sobre América Latina, lo que nombra el nombre

 

Gloria Clemencia Valencia González

Nodo Colombia de la RedMet, Colombia

 

Cita sugerida: Valencia González, G. C. (2016). Investigar desde América Latina y sobre América Latina, lo que nombra el nombre. Revista Latinoamericana de Metodología de las Ciencias Sociales, 6 (1), e001. Recuperado a partir de: http://www.relmecs.fahce.unlp.edu.ar/article/view/relmecsv06n01a01


La georreferencia denominada América Latina, su historia y los desafíos derivados de su configuración y re-configuración, de su encubrimiento, más que descubrimiento (Dussel, 1994), plantea desafíos para las ciencias sociales y para los científicos sociales tanto en lo teórico como en lo metodológico, a partir de cuestionar la territorialización de los resultados y de los trayectos seguidos en el trabajo con el conocimiento, sea que se investigue desde América Latina o sobre América Latina.1

Configurar recortes de realidad desde y sobre este continente geofísico y socio-simbólico desafía, desde las ciencias sociales, la elaboración de conocimientos pertinentes orientados a dar cuenta de los acontecimientos que emergen en este cambio de época que atravesamos y que nos atraviesa, de las movilidades, de los constreñimientos y de las articulaciones planetarias entre ellos para pensar una vida colectiva potente, potencial y potenciable.

En esta línea, la Ciencia Social contemporánea en el mundo y en América Latina, se orienta hacia una perspectiva sistémica, no solo sistemática y, en este giro, una comprensión compleja de las realidades sociales y de sus implicaciones en la generación de conocimiento deviene epistemológicamente relevante y epistémicamente necesaria, si queremos comprender las dislocaciones entre los conocimientos sociales producidos y las realidades sociales que vivimos.

Por tanto, pensar ¿cuáles son los problemas de nuestro tiempo?, y ¿qué desafíos metodológicos plantean tales problemas?, y trabajar sobre estas preguntas deriva en interrogar las cosmovisiones y los trayectos biográficos vitales tanto de quien investiga como de quienes son investigados, con miras a plantear los problemas en densidad y magnitud aumentadas y ampliadas. Donde emerja lo observable de lo no observado y de lo observado, lo inexplicable de lo explicable y de lo explicado, lo interpretable de lo interpretado y de lo no interpretado. Como experiencia donde el criterio preceda, efectiva y afectivamente al método y a su tratado, donde, al decir de Serna (2015), la triada método/metódica/metodología, opere como recursión de ejercicios de pensamiento constante que, en cabeza del investigador, enlazan y relacionan teoría/método y problema con territorios y sujetos concretos y específicos, de principio a fin en la investigación.2

Plantearse el valor de los trayectos biográficos de investigador e investigado se orienta a pensar desde la pasión del presente, en términos de Marramao (2011), para adentrarse en los problemas sociales tanto desde sus diferencias como desde sus disensos normativos y conflictos de valor, en orden a cruzarlos con los imperativos que atraviesan al individuo dado su carácter potencialmente conflictivo. O, al decir del propio Marramao, “trágicamente” incompatibles. Se trata, por tanto, de un acercamiento a configuraciones de la realidad social objetivantes, subjetivas e histórico existenciales en las cuales el sujeto deviene agente de conocimiento.

En consecuencia, emerge como invitación la aproximación al método dialógico para quebrar el pensamiento único mediante la duda, la pregunta y la contra-pregunta de sujetos dispuestos a discurrir, entre palabras y silencios, por el yo, el ellos y el nosotros (Gómez y Elboj, 2001; Ghiso 2009). En este sentido, se trata de formas reflexionadas, elaboradas, donde los ámbitos de reflexión, auto-reflexión, interacción e intersubjetividad operan en intencionalidad. Aún desde el reconocimiento de que las técnicas de generación de información en investigación no son neutras, el problema aquí no son ellas, el desafío está en la naturaleza, el interés y las condiciones de su configuración como espacios de encuentro donde la pregunta y el versar colectivo, se erigen en posibilidad para recuperar, tener y usar la propia voz en medio de formas de poder, tensiones y diferencias, cuyo valor está en que no se habla de los otros, sus textos y sus contextos, insiste Ghiso, sino con los otros, con sus textos y con sus contextos.

Al hablar de convivencia Skliar (2010) indica que ella emerge por la in-comodidad que genera la presencia del otro. Desde la dialógica como método de investigación social, esta incomodidad desafía no solo la convivencia sino el pensar juntos y el conocer juntos. De modo tal que, en relación con ámbitos específicos de problematización, el actualizar, mediante la reflexión rigurosa y sistemática, herramientas metodológicas usadas y conocidas tales como: correspondencias múltiples, análisis del discurso, método experimental o grupos focalizados, nos permite, además realizar la reflexión, expandirla, en términos de hallar los encuentros y hacer visibles los desencuentros emergentes que deriven de interrogar el valor de estas y otras herramientas, para la comprensión de los problemas de nuestro tiempo a través de interrogar su valor en campos de observación crítica, configurados como espacios sociales sobre los cuales los sujetos se ubican para plantear conjuntos de observables3

En síntesis, un espacio donde la conciencia metodológica renovada en América Latina, uno de cuyos esfuerzos sistemáticos representa la Revista Latinoamericana de Metodología de las Ciencias Sociales (ReLMeCS), nos permite preguntarnos con De Soussa Santos ¿Qué es lo que no hemos visto?, ¿qué es lo que hemos de recordar y que hemos de olvidar para vivir juntos?

Modos de acercamiento a estas cuestiones presentan los autores que publican en este número.

Sabrina Almeida en sus “Razões para o desenvolvimento do método experimental na Ciência Política contemporânea”, actualiza el valor de los experimentos para derivar causalidades, aislarlas y probarlas. Sobre todo, en una época donde el desarrollo tecnológico, los avances en software y encuesta de investigación ofrecen posibilidades no vistas antes en relación con el volumen y manejo de datos.

Víctor Hugo Algañaraz Soria, en su reflexión sobre el “Análisis de Correspondencias Múltiples” como herramienta metodológica de síntesis teórica y empírica, valora, desde éste trayecto metodológico, la oportunidad de ampliar el análisis cualitativo y cuantitativo, en este caso sobre el locus universitario privado argentino (1955-1983).

Betina Freidin, redimensiona el trabajo con grupos focalizados en la investigación social y las decisiones implicadas en relación con el tamaño de los mismos, preferiblemente en grupos pequeños, y con el conocimiento previo de los participantes. Claramente el propósito no es generalizar pero sí profundizar.

Guido García Bastán, en su artículo “Investigar cualitativamente las ‘incivilidades’ en la escuela media”, presenta reflexiones metodológicas desde perspectivas interaccionistas y muestra el valor de la categoría incivilidades para el análisis de fenómenos emergentes en la interacción y por lo tanto, puerta de acceso al fenómeno de la conflictividad escolar desde la perspectiva de los actores.

Marina Adamini, por su parte, valora el análisis del discurso en los estudios identitarios como modo propicio para abrir nuevas reflexiones, desde la comprensión del análisis del discurso, como campo heterogéneo que lleva a una autorreflexión teórico-metodológica sobre las decisiones de los investigadores en términos de lo que eligen y lo que descartan.

Finalmente, Diana Milstein reseña el libro de Rosana Guber (2013), titulado La articulación etnográfica. Descubrimiento y trabajo de campo en la investigación de Esther Hermitte, publicado en Buenos Aires por Biblos. La reseña resalta el valor riguroso de la obra como crítica en perspectiva de Etnografía sobre la Etnografía.

Notas

1 Más allá de una disyunción marcada por la preposición desde como origen y sobre como ubicación y relación de prominencia o precedencia. El llamado aquí es a tener presentes las implicaciones de cada uno a la hora de configurar los recortes de realidad para las investigaciones sociales y dar cuenta de sus resultados.

2 Método/metódica/metodología, son trabajados por Serna (2015) como las diferencias y relaciones entre en el camino de la investigación, la lógica del método y la estrategia del investigador para realizarla.

3 Los campos de observación crítica han sido trabajados por Guarín en sus reflexiones e interpretaciones de la obra de Hugo Zemelman así como por Ramírez (2016), como trabajo en construcción al indagar la gestión de la escuela contemporánea.

Bibliografía

Dussel, E. (1994). El encubrimiento del otro. Hacia el origen del mito de la modernidad. La Paz, Bolivia: Plural editores.

Ghiso, A. M. (2009). Investigación dialógica, resistencia al pensamiento único. En Maestros y maestras gestores de nuevos caminos. Educación, conocimiento y poder. Cuadernillo N.º. 50, pp. 12-27.

Gómez, A. J. y Elboj Saso, C. (2001). El giro dialógico de las Ciencias Sociales; hacia la comprensión de una metodología dialógica. En Revista Acciones e investigaciones sociales, N.º 12, pp. 77-94.

Marramao, G. (2011). La pasión del presente. Barcelona: Gedisa.

Serna, A. F. (2015). Método/Metódica/Metodología. Conferencia Inédita en el Seminario de formación investigativa para profesores. Buenaventura, Colombia.

Skliar, C. (2010). Los sentidos implicados en el estar-juntos de la educación, Revista Educación y Pedagogía, Medellín, Universidad de Antioquia, Facultad de Educación, vol. 22, N.º 56, enero-abril, pp. 101-111.

Esta obra está bajo licencia
Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional